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Mostrando entradas de diciembre, 2010

LOS DE ARRIBA Y LOS DE ABAJO...

En el Perú, de norte a sur, de este a oeste somos un país bastante diverso. Razas distintas, idiomas distintos, creencias y cosmovisiones diversas. Somos un país que se representa por el Cebiche, plato típico que revela esa diversidad de condimentos y elementos. Pescado, cebolla, distintos ajíes, camote, cancha o mote, limón, sal al gusto. Igualito es el país nuestro con el que despertamos todos los días. Una mezcolanza de todo. Actualmente y al parecer por pura fachada política, se ventila un crecimiento económico que se dispara y tiende al crecimiento. Sin embargo no es necesario ir muy lejos para encontrarse cara a cara y de forma chocante con realidades completamente distinta. Lo ves en las avenidas, en los restaurantes, están en todos lados, cientos de miles de indigentes enrumbados nómades que deambulan sin rumbo entre el “recurseo” como pieza clave de su supervivencia. No he podido tragarme el cuento de que el Perú está creciendo, al contrario los rumores cotidianos, la prens

EN LA RELIGIÓN NO SE PIENSA, NI SE SIENTE: SE SIGUE AL REBAÑO...

Muchas veces me pregunto, cuales son las razones que nos llevan a creer en que existe o podría existir un Dios todo poderoso que gobierne apáticamente el universo y que haya tenido capacidades notables para la literatura como para dejar sus preceptos en libros que ostentan esforzadas frases de paz y bondad. Sobre todo me cuestiono todo esto, porque hoy, en plena globalización, en esta etapa elevada de modernismo, donde la información se hace cercana a las masas de forma sencilla, cómoda y rápida, no entiendo, no cabe en mi cabeza creer que podemos seguir pecando de ingenuidad. Cuando hablamos de Dios todo poderoso, nos referimos acaso a una efigie que indiscutiblemente es la mayor fuerza, insuperable, inquebrantable. ¿Por qué al hablar de religión o de fé hablamos de poder? Yo no lo entendía, claro, a mis pocos meses de vida, bajo la inconciencia propia del desarrollo biológico de mi infancia, me bautizaron como católico, yo sin siquiera haber aceptado tamaño sacramento. Sin embargo